Una aproximación etnoarqueológica de las culturas Gumuz y Dats´in para entender su orden patriarcal y la influencia en otras sociedades

Una aproximación etnoarqueológica de las culturas Gumuz y Dats´in para entender su orden patriarcal y la influencia en otras sociedades.

Fundación General de la Universidad Complutense de Madrid. 25/3/2019.

Almudena Hernando, junto a habitantes locales
Almudena Hernando, junto a habitantes locales

El proyecto Cultura material, colonialismo y género en Etiopía. Una aproximación etnoarqueológica (financiado por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades) es heredero de dos líneas de trabajo diferentes: por un lado, la investigación arqueológica y etnoarqueológica que había sido desarrollada por Víctor Fernández (UCM) y Alfredo González Ruibal (CSIC) en Etiopía en años anteriores, y por otro, la relacionada con identidad, género y etnoarqueología desarrollada por Almudena Hernando (IP de este proyecto, fig.1) en investigaciones anteriores (en Guatemala y Brasil). 

El objetivo del presente proyecto (coordinado con otro de la Universidad Autónoma de Barcelona, cuya IP, Sandra Montón, trabaja en la isla de Guam) es entender la función que cumple el cuerpo y la cultura material en la construcción de la identidad (particularmente de las mujeres) en dos grupos étnicos que habitan en la frontera entre Etiopía y Sudán, los Gumuz y los Datsin, cuya historia es resultado de la resistencia frente al intento de colonización y dominación de los múltiples estados e imperios de la zona.

Dos de esos mecanismos de resistencia han sido: 1) el progresivo desplazamiento por el territorio hacia tierras cada vez de peor calidad, estrategia de la que guardan memoria muchos de los hombres ancianos, y del que es resultado su llegada a las orillas del río Gelegu, en donde ambos grupos habitan en aldeas que no se mezclan entre sí (fig. 2). Y 2) la utilización del cuerpo y la cultura material para reafirmar identidades colectivas tradicionales que permitieran mantener unido al grupo y escapar a la absorción por parte de los sucesivos grupos dominantes. Esta estrategia ha sido particularmente expresada por las mujeres, quienes, mediante escarificaciones, decoraciones del pelo y ornamentación corporal, mantienen “la esencia” del grupo, al tiempo que construyen y reproducen una identidad subordinada, foco principal de atención en nuestro proyecto. 

Distribución de los grupos étnicos.
Distribución de los grupos étnicos.

Los Dats’in eran virtualmente desconocidos para la investigación occidental. La primera información que se posee sobre ellos es la generada desde nuestro proyecto y por la lingüista Coleen Ashland (2016), quien calcula que pueden quedar sólo entre 300 y 1.000 hablantes -existen también en el lado sudanés de la frontera, pero allí han perdido su lengua a favor del árabe (Ahland 2016: 417)-. Los Gumuz pueden ascender hasta unos 30.000 o 50.000 (James 1977: 14), porque se extienden también por amplias zonas más al sur (en el distrito de Benishangul-Gumuz), y sobre ellos sí existe información bibliográfica (Feyissa Dadi 2011 o González Ruibal 2014, por ejemplo). Sin embargo, en estas publicaciones, y salvo excepciones (por ejemplo, González Ruibal 2014: 138), siempre se ha calificado a los Gumuz de sociedades “igualitarias” o caracterizadas por una “ética igualitaria”, debido a que no existen relaciones jerárquicas, de poder o riqueza, entre los hombres. Tanto los Gumuz como los Dats’in rechazan el uso del arado, que utilizan sus vecinos, y cultivan sólo con palo cavador y una pequeña azada, de forma que neutralizan la posibilidad de acumular excedente y crear diferencias de riqueza. Sin embargo, si se mira la relación entre los hombres y las mujeres de ambos grupos, la relación dista mucho de ser “igualitaria”. De hecho, resulta obvia la relación de dominación. Las mujeres siempre se quedan en un segundo plano cuando hay hombres delante, hasta el punto de que fue necesario contratar a una traductora mujer, Kedijja Mustefa, porque si quien traducía era un hombre, solo los maridos respondían (tanto porque ellos no dejaban hablar a las mujeres como porque ellas no consideraban que tuvieran nada que decir en presencia de ellos). 

El proyecto se ha centrado en un objetivo principal: entender a través de qué mecanismos las mujeres participan en la construcción de su propia subordinación. Si el lugar subalterno de las mujeres se ha reproducido históricamente es porque ellas han compartido las atribuciones culturales de valor diferencial respecto de los hombres, transmitiéndoselas a sus hijos e hijas, que, en consecuencia, han seguido desarrollando actitudes, reacciones, comportamientos, y autopercepciones que reproducen y sostienen el propio sistema que las perjudica. En este proyecto intentamos conocer distintos aspectos particulares de las culturas Gumuz y Dats’in no estudiados hasta ahora (entre otras cosas porque tienen que ver con las mujeres), pero también aspiramos a que las conclusiones sirvan para atender a un objetivo de mayor alcance: entender cómo puede transmitirse la subordinación de género a través de mecanismos que no tienen que ver con el discurso, el lenguaje y el aprendizaje consciente, sino a través del cuerpo, el uso del espacio y de la cultura material. Al no ser un conocimiento reflexionado ni consciente sino una práctica “procedimental”, es mucho más sutil, pero por ello mismo, mucho más eficaz. 

Grupo de mujeres Dats'in.
Grupo de mujeres Dats'in.

Aunque todo el mundo coincidiría en calificar de terriblemente patriarcal la práctica de la clitoridectomía practicada por los Dats’in, en general no incluiríamos en prácticas asociadas a la dominación de género las relacionadas con la decoración de las mujeres, o el uso del espacio. Y, sin embargo, las conclusiones de nuestro proyecto apuntan en esa dirección. Las mujeres se asocian, dentro de las cabañas, a las zonas relacionadas con la polución, la contaminación o la suciedad, al tiempo que son recluidas u ocultadas cada vez que un cambio de etapa vital las podría empoderar (como la menarquía, la boda, o el nacimiento de sus hijos). Por su parte, las abundantes escarificaciones de las mujeres Gumuz (véase fig.3), realizadas no sólo en la cara (como sucedía tradicionalmente en los hombres), sino también en brazos, espaldas (o incluso estómagos en las más ancianas) lleva a asociar el ideal de belleza con el sufrimiento femenino y con la intervención del grupo en el cuerpo de las mujeres (lo que sucede en todas las sociedades patriarcales. Piénsese en los pendientes o la depilación en nuestra propia sociedad). A su vez, las bellísimas decoraciones de cabeza de las mujeres Datsín (fig. 4) esconden un mensaje de género que solo puede descifrarse cuando se observa que todos los bebés son recubiertos de cuentas al nacer, porque las cuentas de colores protegen de los malos espíritus y el mal de ojo (fig.5). Sin embargo, en cuanto empiezan a andar, se les quitan a los niños mientras las niñas las mantendrán hasta después de su muerte, asociando así a las mujeres a una vulnerabilidad esencial y ontológica a la que no se asocia a los varones, convicción que se reproduce socialmente sin necesidad de que medie discurso consciente alguno. 

El trabajo de campo se ha finalizado en febrero de 2019, pero aún quedan muchos datos que analizar y conclusiones que derivar, tanto de tipo etnológico y etnoarqueológico como de tipo estructural; aspiramos a entender las culturas Gumuz y Dats’in, pero también a comprender dinámicas propias del orden patriarcal que nos permitan sacar a la luz aspectos comunes a otras sociedades en donde formas más individualizadas de identidad han ido ocultando los significados que con el cuerpo y la cultura material pueden estar siendo reproducidos socialmente. 

Bibliografía

Ahland, C. (2016): Daatsʼíin, a newly identified undocumented language of western Ethiopia: A preliminary examination. In D.L. Payne, S. Pacchiarotti & M. Bosire (eds.): Diversity in African languages. Language Science Press, Berlin, pp. 417–449.

Feyissa Dadi, G. (2011): Etnoarqueología, identidad y cultura material de un pueblo fronterizo africano: los gumuz de Etiopía occidental. Tesis doctoral. Departamento de Prehistoria, Universidad Complutense, Madrid.

González Ruibal, A. (2014): An Archaeology of Resistance. Materiality and time in an African borderland. Rowman & Littlefield, Latham, Maryland.

James, W. (1977): Notes on the gumuz: their culture, history and survival. Paper presented at the Conference on Ethiopian Origins. School of Oriental and African Studies (28-29 junio 1977), London.

Resultados del proyecto

Falquina, Á. (2017): Arquitecturas salvajes. Etnoarqueología de las viviendas nilo-saharianas en Etiopía occidental. Complutum 28(2): 417-430.

Falquina, Á. (2018): Etnoarqueología de la arquitectura en las aldeas nilo-saharianas de la frontera etíope-sudanesa. Tesis doctoral. Facultad de Geografía e Historia, UCM. Noviembre 2018.

Hernando, A. (2017): Cuerpo, cultura material y género entre los Gumuz y Dats’in (Etiopía). Complutum 28(2): 445-460.

Montón, S. y Hernando, A. (2017): Modern Colonialism, Eurocentrism and Historical Archaeology: Some Engendered Thoughts. European Journal of Archaeology 21(3): 455-471.

Hernando, A. (en prensa):Subordinación de género entre los gumuz y dats’in de Etiopía. Matrimonio, cuerpo y cultura material. Actas del XXI Congreso Internacional de Historia de las Mujeres. Comares, Granada.

Hernando, A. y González Ruibal, A. (en prensa): The Dats’in: Historical experience and cultural identity of an undocumented indigenous group of the Sudanese-Ethiopian borderland.  Journal of Eastern Africa Studies.