Pintor. Posiblemente nacido en Génova, ciudad en la que fue discípulo de Luca Cambiaso. Su obra más significativa antes de venir a España es el fresco con el Martirio de San Lorenzo en el coro de la catedral de Génova. Acompaña a su maestro a España en octubre de 1583, junto al hijo de éste, Orazio Cambiaso, el escultor Gaspare Forliani y a un cierto Andrea. De este segundo equipo de fresquistas genoveses venidos a España en el reinado de Felipe II, el primero sería el capitaneado por Giambattista Castello, il Bergamasco, en 1567, sólo Luca Cambiaso y Lazaro Tavarone recibirían el título de pintores del Rey, diferenciando claramente entre el maestro y el oficial. Gozaría, durante su estancia en España, de un salario mensual de veinte ducados.

El primer encargo que recibiría dentro de la decoración del monasterio de El Escorial sería la bóveda de medio cañón de lo que se denominaba en la época galería de la Reina, actualmente la Sala de Batallas del Palacio de los Austrias de El Escorial. En él colabroraría con otros genoveses del primer equipo como Nicollo Granello o Fabrizio Castello y con Orazio Cambiaso. Se trabaja en estas pinturas entre 1584 y 1585 siendo pagado a Nicolo Granello. En esta amplia superficie se emplean los grutescos, en imitación de la recientemente descubierta Domus Aurea de Nerón, en Roma.

Tras concluirse con éxito este trabajo Nicollo Granello, Fabrizio Castello, Lazaro Tavarone y Orazio Cambiaso, reciben el engargo de acometer la decoración con grutescos y alegorías cristianas de las Salas Capitulares, Prioral y Vicarial y del Zaguán que las separa, ya pintado anteriormente por Francesco de Urbino, para unificar todos estos espacios.

En septiembre de 1586 finalizan los marcos de las escenas de las paredes del Coro de la Basílica con escenas de la vida de San Jerónimo y San Lorenzo, ejecutadas éstas por Luca Cambiasso y Romulo Cincinnato.

En 1587 recae sobre el equipo liderado por Granello el traslado al fresco de una sarga en grisalla con la Batalla de la Higueruela, librada por Juan II de Trastámara, a la pared limítrofe con la Basílica de la Galería de la Reina, actualmente conocida como Sala de Batallas. En 1590, una vez concluido este muro de mayor tamaño, se comprometen a pintar los paños entre las ventanas de la Sala de Batallas trasladando al fresco los lienzos que se les entregan como modelos pintados por Rodrigo de Holanda.. La participación de Lazaro Tavarone, si atendemos a la tasación realizada por Diego de Urbina en 1591, fue más importante en las escenas de San Quintín, Hayn y Gravelingues y sus correspondientes frisos con putti sosteniendo trofeos militares.

Felipe II, por una cédula del 27 de febrero de 1590, le concede licencia para regresar a Italia y doscientos ducados de ayuda de costa.

Aparte de fresquista cultivó, también, la pintura de caballete. Particularmente se percibe la influencia escurialense y de su maestro Luca Cambiaso en un fresco en el que San Lorenzo da limosna en 1622 en el presbiterio de la iglesia genovesa de San Lorenzo. Se ocuparía de la campaña de Felipe II en Portugal, ya a inicios del siglo XVII, en la bóveda del salón principal del Palacio Spínola de Génova, donde también paraecen efigiados Felipe II y el III Duque de Alba. Murió en Génova siendo ya muy anciano.

Obras: bóveda de la Sala de Batallas, 1584-1585; Batalla de la Higueruela, 1587-1590; bóvedas de las Salas Capitulares (junto con Granello, Castello y O. Cambiasso), 1585; artesonados para el colegio y episodios de la guerra de San Quintín en la Sala de Batallas (con Granello y Fabrizio Castello), 1591. Todas estas obras fueron para El Escorial. Dibujos en Museo del Prado.

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Almudena Pérez de Tudela