Proyectos de Innovación

CURSO DE PODA DE FRUTALES, Colectivo Kybele de Agroecología, UPM (14-16 marzo 2011)

Impartido por Javier López.

14-15-16 marzo 2011 - Campos de prácticas de Agrónomos UPM

Aquí os podéis descargar LA PRESENTACIÓN DEL CURSO que nos ha pasado Javier López, el profe del mismo. 

 

(Publicado en "El Terruño" revista editada por el Colectivo Kybele de Agroecología) ¿Quién no tiene algún amigo con un melocotonero de 4 metros? ¿Quién no tiene unos abuelos, tíos, etc. con un manzano que da multitud de diminutos, duros y ácidos pomos? Y sobre todo… al descubrir que estudias eso de ingeniero agrónomo, que piensas “¡algo tendrá que ver con las plantas!”, y después de la habitual pregunta de “…tengo unos geranios un poco pochos, ¿qué les pasa?”, ¿a quién no le han pedido podar esos frutales que tienen nuestros no poco interesados allegados en la parcelita del pueblo?

Seguramente a más de dos nos habrán requerido en alguna de esas tareas. Movidos por estas y otras motivaciones, se nos ocurrió que no estaría de más podar esos frutales del huerto de Kybele, y ya de paso podarlos bien, para lo que un curso no vendría mal. Se lo comentamos a Javier López, quién organizó un genial curso de tres días al que asistimos unos quince propios y ajenos a Kybele.

El primer día consistió en un intensivo curso de teoría en la que nos refrescó qué era eso del cambium vascular, que no es un aumento de peso, o eso de la dominancia apical, que no es una sociedad de super-abejas. No faltó el esquema de la niña y el columpio (muy gráfico todo) que nos permitió saber que aunque el árbol siga creciendo, la niña seguirá conservando su columpio a la altura original. Y por supuesto, ya se metió en materia con la poda de los frutales de pepita (manzano, peral, membrillero…), no sin antes hacer un repaso de su morfología: que si esto es un ramo de madera, que si esto es un chupón, que si es más pequeño es una brindilla, que si aún es más pequeño es un dardo… Y por último, salimos a ver los manzanos del campo de prácticas para aplicar todo lo aprendido en clase.

El segundo día, hicimos un repaso de las épocas de poda (nunca habría pensado que tantos factores podían influir). Y proseguimos con la poda pero esta vez de hueso (melocotonero, ciruelo, cerezo, albaricoquero…), no sin antes comprobar que la morfología de los árboles es diferente y por lo tanto la poda también. Como el día anterior, también salimos al campo para ver cómo al ritmo de zaska! zaska! la copa de un melocotonero se reducía a su tercera parte, mientras escuchábamos perplejos los cálculos de Javi concluyendo que todavía sobraba la mitad de las ramas (“con 20 kilos de melocotones en piezas de medio kilo está bien…”). Ya te digo.

El tercer día, sólo estuvo dedicado a la poda de las ornamentales. Que si una poda de recorte a los setos, que sí un despunte del romero antes de que se vuelva salvaje y enmarañado…

Pero lo mejor de todo el curso fue haber pasado unas horas con una persona como Javi, riguroso y profesional en sus explicaciones pero agradable y simpático por encima de todo. Desde Kybele, te damos de nuevo las gracias y tan sólo espero, poder subsanar el destrozo que hizo mi padre en el melocotonero.