El 24 de junio Noemí Sogari presentó el proyecto del grupo GIESMA, que lidera, y que aborda un enfoque integral y participativo para el despliegue de soluciones de energía limpia en zonas rurales y socialmente vulnerables de América Latina. Su propuesta no se limita a implementar tecnología renovable, sino que promueve un modelo de transición energética justa y sostenible, que combina innovación técnica con la participación comunitaria, respeto cultural y equidad social. Se centra en proyectos de energía solar térmica como secaderos solares, diseñados para ser accesibles y construidos en colaboración con las propias comunidades, destacando la importancia de la coconstrucción: la tecnología se desarrolla con la comunidad, no solo para ella.