Autora: Dra. Beatriz Chaves Yuste

8 mar 2024 - 09:00 CET

Gracias a las redes sociales, en especial aquellas que ofrecen pequeños vídeos que se pueden utilizar como cápsulas de aprendizaje (i.e. TikTok, Instagram), han proliferado exponencialmente los profesores de inglés que dan consejos y explican diferentes giros y expresiones especialmente de tipo léxico. Cuentas como mariaspeaksenglish, englii_insta, mike.thechameleon, o englishwmariandwilliam, son aclamadas por miles de seguidores en busca del santo grial que les ayude a dominar, de una vez por todas, la lengua inglesa.

A pesar del formato fresco, amigable y entretenido de estos y muchos otros vídeos de profesores en redes sociales, todas estas cápsulas se centran básicamente en el aprendizaje de vocabulario y en proporcionar una pronunciación modelo de aquellos términos de mayor dificultad. Por ende, las diferentes destrezas lingüísticas necesarias para comunicarse con éxito en cualquier contexto (comprensión y expresión escritas y orales) no tienen cabida en este formato. Más aún, estas cápsulas de vocabulario o pronunciación aparecen en un entorno completamente descontextualizado lejos de situar al estudiante en el centro de su propio aprendizaje. Además, no debemos olvidar que el usuario, aprendiente consumidor de este tipo de productos es un mero espectador. Difícilmente puede interactuar con otros ni puede recibir una retroalimentación de su producción por parte de dicho profesor.

No obstante, a pesar de no ser la solución que sustituye a una clase real con profesores y otros estudiantes con los que se puede interactuar y recibir la guía y feedback adecuados en el proceso de enseñanza-aprendizaje, estas pequeñas píldoras pueden considerarse un complemento más, un input fresco que puede amenizar el viaje en el metro o la espera en el dentista.