Atril
(Del latín lectorile, a su vez procedente de lector). Soporte para libros que consta de un plano inclinado que apoya o no sobre un pie, para facilitar las lecturas, y vino a sustituir en la iglesia medieval la función del acólito que sujetaba con sus manos los textos de la misa. Es equivalente al analogion de la iglesia ortodoxa sobre el que se exponen los iconos o el evangeliario para la veneración de los fieles.
Atril incorporado a pulpito*, Nicola Pisano, c. 1260, Catedral de Pisa.
Su origen se remonta al mundo grecorromano y es común a otras culturas, como símbolo de educación y conocimiento.
En las iglesias cristianas los atriles son de caja (para su uso sobre una mesa), de pie o de cuatro caras o facistol*.
Apenas se conservan piezas anteriores al siglo XIV. Los más antiguos en madera generalmente de nogal, piedra o forja, presentan la plataforma unida al dorso de un águila con las alas desplegadas, símbolo de San Juan Evangelista, testigo de la resurrección de Cristo.
VCH
⇒ Para seguir leyendo...
BANGO TORVISO, I et al, Diccionario de Términos artísticos, Silex, 2017.
DE VOGUÉ, Melchior y Jean NEUFVILLE, Glossaire de termes téchniques à l´usage de “la nuit des temps”, Zodiaque, 2ª ed. revisada por R. Oursel, 1971.