Retrato del Cardenal Cisneros


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Retrato del Cardenal Cisneros

Eugenio Cajés (Madrid, ca. 1575-1574-Madrid, 1634)

Firmado y fechado en el ángulo inferior izquierdo: "Eugenius Caxes Acade/micus Matriti. f./1604/[rúbrica]"

1604

Óleo sobre lienzo. 212 x 144,5 cm

Número de catálogo: CUC001504


Se trata de uno de los retratos oficiales más conocidos del cardenal Cisneros cuya imagen e iconografía fundamentales habían quedado ya fijados tanto en pintura como en escultura por artistas contemporáneos al prelado, como el busto del escultor Felipe Bigarny, presente en la exposición, que se convirtió en el prototipo de la imagen oficial del cardenal.  El deseo de la Universidad de Alcalá era contar con un retrato oficial, a tamaño natural, en el que se reuniesen y proyectasen de manera evidente las principales facetas de su fundador (hombre de iglesia, y de estado, político, militar, intelectual y mecenas cultural), con una evidente función propagandística y de ensalzamiento tanto del mismo personaje como, a través de él, de la propia institución.

Este es un retrato sedente del cardenal Cisneros en el que el pintor, Eugenio Cajés, coloca el rostro de perfil con ese característico gesto adusto, enjuto, intenso y penetrante. Cisneros viste las ropas propias de su dignidad cardenalicia bajo las cuales se distingue la armadura, parte de cuyos elementos, como los guanteletes, están a sus pies. Está sentado es una silla de cadera o suerte de jamuga decorada con tachuelas doradas. Porta un bastón de mando que parece que podría identificarse precisamente con el perdido rico bordón musulmán que el propio Cisneros trajo consigo como botín de Orán y que regaló a la universidad. Al fondo se observa una escena de batalla ante una ciudad amurallada a orillas del mar. Se trata de una alusión evidente a la conquista de Orán, tomada por el prelado en 1509 y en la que él mismo participó. 

Junto al cardenal se encuentra un bufete cubierto de terciopelo rojo decorado con rica pasamanería y su escudo heráldico. Sobre este y apoyados en el suelo destacan seis volúmenes correspondientes a la edición de la famosa Biblia Políglota Complutense impulsada por Cisneros.