Museo de la Farmacia Hispana
Centro/Facultad: Farmacia Director: D. Antonio Isacio González Bueno Conservadora: Alejandra Gómez Martín Contacto: +34 913 94 17 97 +34 913 94 11 16 / 11 17 museofar@ucm.es / museos@ucm.es |
Dirección: Facultad de Farmacia, Plaza de Ramón y Cajal, Ciudad Universitaria, 28040 Madrid. Transportes: Autobuses: G, I, U, 82, 132 Metro: Ciudad Universitaria (Línea 6) |
Descripción de los fondos:
Por la cantidad y calidad de piezas, las colecciones más destacadas son:
- Farmacias antiguas
1.- Farmacia Hispano-Árabe
2.- Laboratorio alquimista
3.- Farmacia de Tavera
4.- Farmacia del Hospital de San Juan Bautista de Astorga (León)
5.- Botica de Gibert
6.- Botica de Sangarcía (Segovia)
7.- Botica Bellogín (Valladolid)
8.- Botica del Licenciado Maeso y Bildroff
- Cerámica y porcelana
Incluye piezas de las más importantes manufacturas peninsulares, a las que se unen ejemplares de lozas francesas, italianas y holandesas.
- Vidrio y cristal
Excelentes ejemplos de recipientes de conservación e instrumental de laboratorio usado en las operaciones de destilación.
- Instrumental
Interesante conjunto de instrumental para la elaboración de medicamentos (pildoreros, grageadoras,, compresores, moldes, dosificadores…) al que se une el característico de las prácticas físico-químicas (microscopios, polarímetros, colorímetros, lupas…).
- Balanzas
Elementos imprescindible en las oficinas de farmacia, se conservan granatarios con sus correspondientes pesas, romanas de pequeñas dimensiones, balanzas de mano para pesar papelillos, balanzas doble y balanzas de precisión.
- Almireces y morteros
Amplia colección con piezas datadas desde el siglo XVI al XX, realizadas en distintos materiales pero con predominio del bronce. Presentan decoraciones muy variadas en función de las tendencias estéticas de cada época.
- Colección de medicamentos
En ella se incluyen elementos utilizados desde la más remota Antigüedad para el remedio de la enfermedad (“pezuña de la gran bestia”, “unicornio”, cuerno de rinoceronte o carne de momia) y por medicamentos con gran tradición en las farmacopeas, como triaca, el coral, las cantáridas o la tierra sellada. Junto a ellos, una numerosa colección de específicos y especialidades farmacéuticas correspondientes a la etapa inicial de industrialización del medicamento, expuestos junto a los carteles que los publicitaron.
Historia del museo:
El museo de la Farmacia Hispana comienza a gestarse en los primeros años del siglo XX por iniciativa de Rafael Folch Andreu, quien lograría convertir sus aficiones de coleccionista en legado histórico. Gran parte de su actividad, tras su nombramiento como catedrático de Historia de la Farmacia en 1915, se orientó a la formación y posterior enriquecimiento de las colecciones que serían fundamento inicial del Museo. Ubicadas inicialmente en la madrileña calle de la Farmacia, en el edificio de la antigua Facultad, y sin locales para su instalación, las colecciones se fueron acrecentando mediante la compra de piezas con cargo a los excedentes que, para prácticas, recibía la cátedra por parte de la Universidad. La construcción de la actual Ciudad Universitaria bajo el patrocinio de Alfonso XIII, hizo posible un proyecto de creación del Museo de Historia de la Farmacia para el que se concedieron unos locales, ampliados años más tarde, y que son los que ocupa actualmente. El traslado al nuevo emplazamiento se produce en 1944; para esa fecha Rafael Folch ya había conseguido reunir numerosos utensilios de laboratorio y un completo botamen de cerámica catalana, además de obtener la donación de una esmerada reproducción de la botica del Hospital Tavera (Toledo).
El Museo se inaugura en 1951, fecha en la que ya se habían adquirido el grueso de las colecciones, Rafael Folch había alcanzado la edad de jubilación y su hijo, Guillermo Folch Jou, era encargado de cátedra, ocupándose de la dirección del Museo, cargo que mantendría hasta su fallecimiento en 1987.
Bajo la dirección de Guillermo Folch se enriquecen las colecciones con piezas diversas de su colección particular y con el mecenazgo de la propia Universidad Complutense. Entre todo ello destacan tres magníficos conjuntos: la farmacia barroca del antiguo Hospital de San Juan Bautista de Astorga (León), la reproducción de una botica árabe y la botica del Licenciado Maeso, conjunto decimonónico de estilo neogótico, procedente de la Plaza de Santo Domingo en Madrid.
A la muerte de Guillermo Folch Jou, la dirección del Museo fue asumida por el catedrático de Historia de la Farmacia, Francisco Javier Puerto Sarmiento. Bajo su dirección, con el trabajo de la primera conservadora del museo, Eugenia Mazuecos, y con el inestimable apoyo del profesor Benito del Castillo, Decano de la Facultad de Farmacia durante un largo periodo de tiempo, las colecciones se incrementaron con piezas diversas y con dos de los más importantes ingresos de las últimas décadas: la antigua botica de Sangarcía (Segovia) y la antigua botica Bellogín de Valladolid, ambas del siglo XIX y expuestas actualmente en diferentes espacios de la Facultad de Farmacia.