“Europa: vergüenza de mirarse en el espejo"

Sami Naïr Conferencia extraordinaria

“Estamos ante refugiados en el sentido puro de la Convención de 1951, creada para acoger a los ciudadanos del Este que ahora rechazan la solidaridad”, Sami Naïr empieza así a denunciar una por una las vergüenzas de Europa ante la reciente crisis de los refugiados. Recuerda que sirios, libios, afganos,… son refugiados de manual, que los países que más acogen son los más pobres (Turquía 11%, Pakistán 10,5%,…) e interpela: “¿Podemos mirarnos en el espejo y decir: creo en la democracia, en la solidaridad humana?”

Naïr revela que “el rechazo estaba programado en la estrategia a largo plazo de la Unión Europea, fueron los ciudadanos los que se ha movilizado” y sostiene que el estallido del sistema migratorio es el estallido del sistema europeo.

 

Una Europa que pacta con Turquía sustituyendo inmigrante por refugiado, una “manipulación semántica” que comporta un cambio legal, “a partir de ahí se aplica la ley de los inmigrantes”. Una Europa que viola sus principales textos: la Carta de Derechos Humanos, que obliga a revisar los expedientes antes de expulsar; la Convención de Ginebra, que prohíbe las expulsiones colectivas…

“El modelo europeo está terminado y el golpe duro lo han dado los británicos”, afirma Naïr. “El ciclo de la ampliación ha muerto también, lo demuestran la crisis de los refugiados y la violación sistemática (Polonia y Hungría sobre todo) de los valores europeos. A la hora de construir una Europa política no hay acuerdo, se ve que es una unión de intereses. Hay que salir de las discusiones políticas falsas, hay que entrar en la construcción de un estado político sui generis”, sentencia

Sobre todo porque “160.000 personas para 300 millones de habitantes es una vergüenza”